lunes, 16 de febrero de 2009

Tiempo perdido

Cada momento de nuestra vida hemos observado pequeños pedazos de nuestra conciencia reflejados a través del vidrio del carro que mientras estamos atorados en el tráfico rumbo a nuestro destino.

De niños imaginabamos cualquier cosa, un superheroe que pasaba mientras veiamos por la ventana, o talvez alguna aventura que nos incluia como personajes principales; de jovenes simplemente observabamos a ver si pasaba una mujer guapa, deleitarnos un momento con su cuerpo, criticarla, y soñar, cuando cumplía con nuestras espectativas, que hablabamos con ella y la convertíamos en una amiga, novia o algo más; cuando somos adultos la vida cambia, dejamos de ver por la ventana como lo hacíamos, sólo vemos por la ventana para buscar una salida, una entrada, cualquier cosa que nos mueva más rapido y asi llegar a nuestro destino; queremos llegar a nuestra meta sin importar como; el costo... nuestra vida, el disfrute de cada momento, el deleite de aquella mujer hermosa o la diversión de aquel superheroe.

Recordemos los instantes de felicidad que, mientras atorados en el tráfico, nos quitabamos el aburrimiento de la inmovilidad del automóvil para simplemente observar como las demás personas estan, bueno estaban de la misma forma que tú antes de ver lo bueno del momento.

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